Que me revuelvas,
eso me gusta…
Me gustas
cuando te sientas
a mirarme
mientras me pinto
los ojos y
cuando,
sin rumbo,
te viajo
(eso me gusta mucho).
Me gustas, también,
cuando estudio
inglés contigo y
cuando maldigo
haber roto las
medias
de cristal
de bohemia
que me regalas.
Me embriaga
que te rías
cuando bailo
desnuda y
desierta
en tu isla,
y cuando escalo
por tu espalda
para no dejarte
marchar
(algún día
necesitarás un
armario nuevo
para colgar
tanta risa).
Me enloquece
que acaricies
mi territorio
de olivos y
de almendras
(sobre todo cuando
estoy en primavera).
Entero y
suave,
tierno y obsceno.
Me gustas
mucho,
mucho,
mucho…
Rozo
la
bendita
locura.
************
Este poema lo escribí hace unos años, creo que no lo he publicado nunca y me lo he encontrado sentado en el escalón del archivo, sonriéndome desde algún mega perdido.
Ahora es vuestro.
Inédito, porque los versos son del mundo. Porque amo compartir.
Feliz lunes, feliz día del beso, querid@s, esta semana es muy especial porque presento el nuevo libro,”Poesía para directiv@s”, y porque es la gala de entrega de premios del Certamen Internacional de poesía Yolanda Sáenz de Tejada en El Bonillo, Albacete.
¡La VII edición ya! El mejor regalo que me ha hecho la literatura.
Estáis todos invitados. Vais a encontrar a una Yolanda llena de dicha en ese pueblo que la adoptó hace años y que siempre me abraza infinito.
Los eventos los encontraréis también en mi web y en mis redes, sois siempre bienvenidos. Muy bienvenidos.
Y para terminar este post, os dejo a Carlitos Hojas, que es la mejor manera de empezar la semana, con “los colmillos llenos de deseo que no respetan nada…”
Gracias, Teresa, por traerlos…
Experta en visibilidad femenina y Redes Sociales. Escritora de 19 libros, conferenciante, empresaria y poeta. Profesora de Postgrados en La Universidad de Cantabria. Marca personal creativa y humanista. Coach ejecutiva y de equipos certificada.
Presentadora y dinamizadora de eventos.
“A mayor tecnología, más necesidad tenemos de humanizarla”
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2 Comments
Querida poeta:
Cuántas Yolandas y Carlitos necesitamos en la vida…
Me empeño tanto en que estos chicos y su música viaje y vuele, que a veces me acusan (las malas lenguas) de estar demasiado volcada con ellos. A mi me da igual…Cada cual con los suyos que actúe como crea conveniente. Lo que si te puedo contar es que cuando los oigo cantar en el patio de casa, el mundo es más bonito y nosotros (ellos y yo) más felices. Y éso es lo que suma y lo que cuenta.
Precioso tu poema del lunes, como siempre… Leo, releo y me quedo con cada verso; y aprendo. ¿Hay algo más bonito que aprender de las cosas buenas que te ponen en el camino? Pues yo creo que no…Bueno sí, hay muchas cosas bonitas y buenas. Sólo hay que saber distinguirlas y hacerlas nuestras, y aún mejor,compartirlas. Justo lo que tú haces con nosotros. Un abrazo infinito, tanto a lo alto como a lo ancho y un ramillete de amapolas silvestres y salvajes para que coloques a bailar en el agua de un jarrón y lo coloques encima de tu mesa, en mi nombre.
Vaya regalo de lunes tu mensaje… muchas, muchas gracias, Teresa, es un honor que sientas y lo escribas así.
Eres una mujer maravillosa y muy apasionada, la gran suerte es que eres capaz de alejarte de esos que, como tú dices “no lo entienden”.
Un abrazo muy grande y gracias por leerme y sentirlo así.