Este poema lo escribí hace tiempo y hoy, después del día tan triste que vivimos ayer en este país, es el que me nace de nuevo.
Padre mío, que estás en la tierra
amándonos como salvajes.
Creo,
profundamente,
en la mentira más
hermosa,
en las segundas
oportunidades, y
en que si mis hermanas
se enfadan
conmigo
es porque
llevan razón
(aunque no la lleven).
Y creo en mis
hijas,
hasta reventar;
en la poesía
como arma
necesaria
y en los abrazos
que me astillan
de pasión.
Creo en mi madre,
cuando dice
que es mejor
(siempre, siempre, siempre)
dar que recibir,
y en el hombre
que vive
conmigo
–y amo–,
por colonizar
mi piel y
mis molinos
de viento.
Creo en mis amigas.
Y no creo
en las personas
que fundan
su imperio
de la verdad;
sin dudar,
como si fueran
arcángeles
cubiertos
de oro,
de honradez y
de-monio.
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Feliz lunes, queridos, feliz día del beso, hoy más que nunca.
Que la semana comience con mucho, mucho, mucho amor desparramado por el suelo y no demos abasto para recogerlo de tanto como tenemos :).
Experta en visibilidad femenina y Redes Sociales. Escritora de 19 libros, conferenciante, empresaria y poeta. Profesora de Postgrados en La Universidad de Cantabria. Marca personal creativa y humanista. Coach ejecutiva y de equipos certificada.
Presentadora y dinamizadora de eventos.
“A mayor tecnología, más necesidad tenemos de humanizarla”
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