Aprender de nuevo a abrazar.
hinchar las arterias,
la piel,
el no me importa,
total,
si al final se irá.
Ahorcar el vientre
que se ofrece
caliente,
desenfrenado,
impúdico.
Olvidar el último
abrazo de
otro,
su olor a
sudor e incienso.
Las quemaduras
de su mirra
desparramada
por mi vello
–el del pubis, el
de las axilas,
el de su pecho.
El vello, al fin… –.
Aprender de nuevo a abrazar.
Cada vez.
No infectar de
nostalgia ni recuerdos
esta carne minada
de ausencias.
Este bebedero de
animales enfermos
que siempre
terminan huyendo.
Que hunden mis
te quiero
esclavizándome
sin pudor
–pero marchándose–.
Aprender de nuevo a abrazar.
Amputar el último
beso.
Gatear de nuevo
por amor.
Bienaventurado tú
que has sido
elegido para
que yo,
esta perra
famélica,
aprenda de nuevo
a abrazar.
………..
Feliz lunes, queridos, feliz día del beso (y del abrazo 🙂 ).
Voy a ver qué tal se me da eso de bailar zumba hoy que hay una clase por aquí que tiene muy buena pinta y me he levantado yo con ganas de bailar hoy.
Que tengáis un día precioso y que ojalá aprendamos algo nuevo que nos haga crecer. Vamos a ello.
Experta en visibilidad femenina y Redes Sociales. Escritora de 19 libros, conferenciante, empresaria y poeta. Profesora de Postgrados en La Universidad de Cantabria. Marca personal creativa y humanista. Coach ejecutiva y de equipos certificada.
Presentadora y dinamizadora de eventos.
“A mayor tecnología, más necesidad tenemos de humanizarla”
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies
ACEPTAR