Estos días tengo aquí a mi madre, esa guerrera de siete hijos que nos hace las croquetas y el arroz con leche más exquisito del mundo…
Ella nos ha inculcado tres mandamientos que considero fundamentales para cualquier marca personal humanista, ahora que tanto hablamos de ello (a mí me las repite en cada llamada de teléfono, con lo que no las puedo olvidar. Espero ser tan pesada con mis vikingas 🙂 )
1: vive el presente, por si el futuro se adelanta.
2: es mejor siempre, siempre, dar que recibir.
3: agradece cada gesto que tengan contigo; cada minuto que inviertan en ti.
DEL PRIMERO, he aprendido que se me da bien conjugar los verbos y que sí, que lo mío es el presente continuo, tal y como ella me insiste (hija mía, tú vive el momento). Jamás ha sido el pasado (hace diez minutos ya lo fue) y que no entiendo de futuro, salvo el necesario para que las vikingas puedan estudiar (su pasión, por supuesto).
Para conseguir el modo “presente” son fundamentales las acciones externas, como apagar el móvil si estás en una cena, o pensar a menudo, sin hacer nada específico. Y, por supuesto, no contar las batallitas pasadas mil veces a todo el que te encuentras.
DEL SEGUNDO: a estas alturas, sé que es adictivo y que realmente el poder reside en tener la capacidad, los contactos, el tiempo, la casa o la mesa llena de manjares… todo ello para poder dar. Nunca se me dio bien pedir pero me apasiona poder ofrecer.
Eso sí, he hecho un máster en distinguir a las personas que piden para ellas mismas o las que lo hacen para poder luego también dar, plantar… A las primeras, ni agua. A las segundas, mis verbos y mis ganas.
Y DEL TERCERO: es imposible obviarlo porque cuando te educan en el agradecimiento, la vida es más hermosa y disfrutas el doble.
Me gusta mucho decir, en las conferencias o cursos de formación, que hay dos tipos de agradecimiento: el que corresponde a un estímulo y a su respuesta (te doy las gracias porque me invitas a cenar) o el agradecimiento que buscas y que encuentras (gracias por preparar la mesa para mí, por poner velas, por invertir tu tiempo en cuidarme, por leerme, por sonreírme, por cuidarme con un mensaje, por leer mi mail, por influir en mi vida con tus post…).
Éste es el agradecimiento que realmente te hace sentir importante porque es exclusivo para ti. La pena es que vamos tan rápido que no lo encontramos (¿porque no lo buscamos…?).
Gracias a la vida, que me ha dado tanto… (y gracias a ti, mamá, que hoy me vas a hacer esos filetes empanados que nos encantan 🙂 ).
Así qué, sabiendo que con estas tres primicias ella es feliz y lo cumple cada día de su vida, ¿por qué no lo voy a ser yo?
****
Feliz miércoles, queridos. Feliz “hornada” y vamos a por ese presente continuo que nos corre por las venas…
Experta en visibilidad femenina y Redes Sociales. Escritora de 19 libros, conferenciante, empresaria y poeta. Profesora de Postgrados en La Universidad de Cantabria. Marca personal creativa y humanista. Coach ejecutiva y de equipos certificada.
Presentadora y dinamizadora de eventos.
“A mayor tecnología, más necesidad tenemos de humanizarla”
Utilizamos cookies propias y de terceros para fines analíticos y para mostrarle publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de sus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Para más información consulte la política de cookies
Puede aceptar todas las cookies pulsando el botón "Aceptar" o rechazar o configurar su uso pulsando el botón "Configurar".
Estas cookies son necesarias para que el sitio web funcione y no se pueden desactivar en nuestros sistemas. Por lo general, solo se establecen en respuesta a las acciones realizadas por usted que equivalen a una solicitud de servicios, como establecer sus preferencias de privacidad, iniciar sesión o completar formularios. Puede configurar su navegador para que bloquee o le avise sobre estas cookies, pero es posible que algunas partes del sitio no funcionen en ese momento.
Cookies utilizadas:
Estas cookies permiten mejorar la funcionalidad y la personalización, como videos, chats en vivo y su idioma preferido. Pueden ser establecidos por nosotros o por proveedores externos cuyos servicios hemos agregado a nuestras páginas. Si no permite estas cookies, es posible que algunas o todas estas funcionalidades no funcionen correctamente.
Estas cookies nos permiten contar las visitas y las fuentes de tráfico, para que podamos medir y mejorar el rendimiento de nuestro sitio. Nos ayudan a saber qué páginas son las más y las menos populares y a ver cómo se mueven los visitantes por el sitio. Toda la información que recopilan estas cookies es anónima. Si no permite estas cookies, no sabremos cuándo ha visitado nuestro sitio.
Estas cookies se establecen a través de nuestro sitio por nuestros socios publicitarios. Estas empresas pueden utilizarlos para crear un perfil de sus intereses y mostrarle anuncios relevantes en otros sitios. Si no permite estas cookies, no experimentará nuestra publicidad dirigida en diferentes sitios web.
Estas cookies son necesarias para mostrar contenido de redes sociales como facebook, twitter, pinterest, etc. De tal forma que puedas compartir nuestro contenido con tus redes sociales favoritas.
3 Comments
Gracias, Yolanda. Muy, pero que muy interesante. Sin duda.
Hago mios, con tu p, estos tres mandamientos.
Un abrazo.
Muchas gracias, por leerme y por hacer tuyos estos principios que resumen toda una forma de vida.
Dale gracias. Besos ,abrazos y dile que la quieres siempre que puedas a tu madre pues no estará siempre .La mía ya nos dejó, te quiero mamá